Lasaña
La lasaña es un plato tradicional de la cocina italiana que consiste en capas de pasta intercaladas con carne molida o ragú, salsa de tomate, bechamel y queso rallado. Se monta en un recipiente rectangular y se hornea hasta que las capas de pasta estén cocidas y el queso gratinado en la parte superior. Es conocida por su textura reconfortante y su combinación de sabores robustos. La lasaña se sirve caliente, cortada en porciones cuadradas, siendo un plato abundante y muy apreciado tanto en Italia como internacionalmente.
A continuación la receta detallada para su preparación:
Ingredientes:
- 250 g de láminas de lasaña (preferiblemente precocidas)
- 500 g de carne molida de res y cerdo (o solo de res)
- 1 cebolla grande, picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 800 g de tomate triturado en conserva (o tomate natural triturado)
- 1 cucharadita de azúcar (para contrarrestar la acidez de los tomates)
- 1 cucharadita de orégano seco
- 1 cucharadita de albahaca seca
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
- 200 g de queso mozzarella rallado
- 100 g de queso parmesano rallado
Para la bechamel:
- 50 g de mantequilla
- 50 g de harina
- 500 ml de leche entera
- Sal, pimienta y nuez moscada al gusto
Instrucciones:
Preparación de la salsa de carne:
Calienta una sartén grande a fuego medio-alto y añade un chorrito de aceite de oliva.
Sofríe la cebolla picada hasta que esté transparente, luego agrega el ajo picado y cocina por un minuto más.
Añade la carne molida y cocina hasta que esté dorada y bien cocida, deshaciendo cualquier grumo con una cuchara de madera.
Vierte el tomate triturado en la sartén y añade el azúcar, el orégano, la albahaca, sal y pimienta al gusto. Cocina a fuego medio durante unos 20-30 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que la salsa espese. Si es necesario, añade un poco de agua o caldo de carne para ajustar la consistencia.
Preparación de la bechamel:
En una cacerola pequeña, derrite la mantequilla a fuego medio.
Añade la harina y cocina, removiendo constantemente con un batidor de varillas, durante unos 2 minutos para hacer un roux (mezcla de mantequilla y harina).
Vierte lentamente la leche caliente sobre el roux, mientras sigues batiendo para evitar grumos.
Cocina la bechamel a fuego medio-bajo, sin dejar de remover, hasta que espese lo suficiente para cubrir el dorso de una cuchara. Añade sal, pimienta y nuez moscada al gusto. Retira del fuego y reserva.
Montaje de la lasaña:
Precalienta el horno a 180°C (350°F).
En un recipiente rectangular para horno, extiende una capa fina de salsa de carne en el fondo.
Coloca una capa de láminas de lasaña encima, asegurándote de que estén bien cubiertas pero sin superponerse.
Cubre las láminas de lasaña con otra capa de salsa de carne y luego una capa fina de bechamel.
Espolvorea queso mozzarella y queso parmesano rallado sobre la bechamel.
Repite el proceso hasta que hayas usado todas las láminas de lasaña y termina con una capa de bechamel y queso rallado.
Horneado:
Cubre el recipiente con papel de aluminio y hornea en el horno precalentado durante 30 minutos.
Retira el papel de aluminio y hornea por otros 10-15 minutos, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante.
Servir:
Deja reposar la lasaña durante unos minutos antes de cortarla en porciones y servirla caliente.
Disfruta de esta deliciosa lasaña casera acompañada de una ensalada verde fresca y un buen vino tinto si lo deseas.
¡Espero que disfrutes de esta receta clásica de lasaña, llena de sabores reconfortantes y perfecta para compartir en una comida familiar o con amigos!
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